Darwin contra el fumador

Según la selección natural, aquellos individuos con características menos favorables tendrían menos posibilidades de encontrar pareja sexual y así poder transmitir su genética a una posible descendencia. Es decir, un ejemplar aparentemente débil, sería rechazado y no tendría opciones de tener hijos, no perpetúandose sus características a nuevas generaciones.

Imagina por un momento que los seres humanos tuvieran el tórax transparente, pudiéndose ver sus pulmones. Imagina un chico y una chica que se miran en una discoteca. Él, fumador desde hace unos 15 años, luciría unos pulmones bien negros, alquitranados, secos y poco elásticos. Lógicamente a ella no le parecería un buen ejemplar para llevarse a la cama y tener descendencia. Sin duda buscaría mejor una pareja que dejara ver unos sanos y preciosos pulmones que aseguraran una saludable descendencia… un padre capaz de proteger y mantener a la prole durante muchos años.

Por todo esto, podríamos afirmar que si los fumadores pudieran mostrar el daño ocasionado por el tabaco del interior de su cuerpo, se hubieran extinguido hace mucho tiempo como los dinosaurios.

Corazón que no ve, corazón que no siente. Que no lo veas no significa que no esté ocurriendo.

http://www.fumabook.com

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