Es curioso cómo para comercializar un medicamento que mejore tu estado de salud o incluso pueda salvarte la vida, es necesario adjuntarle un prospecto donde recoja toda la información relacionada con el fármaco, pero PARA EL TABACO NO. Por esta razón, os adjunto lo que podía ser un «PROSPECTO DEL TABACO«. Cuando finalice la lectura, pregúntese si usted tomaría alguna pastilla que además de no poseer ningún efecto terapéutico presentara toda esta información en su prospecto.
Nombres comerciales: Se obvian para no hacer publicidad.
Composición: Nicotina y Alquitrán. Otros: Amonio, Cianuro de hidrógeno, Amoniaco, Tolueno, Arsénico, Dibenzacridina, Fenol, Butano., Polonio 210, DDT, Acetona, Naftilamina, Metanol, Pireno, Dimetilnitrosamina, Naftaleno, Cadmio, Cromo, Monóxido de carbono, Benzopireno, Cloruro de vinilo, Uretano, Butadieno, Berilio… hasta más de 4.500 sustancias químicas.
Excipientes usados para suavizar la aspereza del tabaco: azúcar, chocolate, miel , regaliz, mentol, etc.
Lea todo el prospecto detenidamente antes de empezar a consumir este producto porque contiene información importante para usted:
-
Este producto no es un medicamento, todo lo contrario, es un conjunto de sustancias que genera innumerables enfermedades y la muerte.
-
Siga exactamente las instrucciones de administración del producto contenidas en este prospecto.
-
Conserve este prospecto, ya que puede tener que volver a leerlo para volver a ignorarlo.
-
Si necesita consejo o más información se recomienda no acudir a páginas web, redes sociales o a otros fumadores. Allí solo encontrará información sesgada por intereses comerciales o por fumadores que están sometidos a su propia adicción.
-
Si experimenta efectos adversos no consulte Internet o a otros fumadores. Acuda a su médico, psicólogo o farmacéutico, ellos le aportarán información correcta.
-
Debe consultar a un médico si su estado de salud empeora por el consumo de este producto. El sistema sanitario público asumirá los gastos derivados de su consumo de tabaco.
Contenido del prospecto
1. Qué es el tabaco y para qué se utiliza
2. Qué necesita saber antes de empezar a fumar tabaco
3. Cómo fumar tabaco
4. Posibles efectos adversos
5. Conservación del tabaco
6. Contenido del envase e información adicional
1. Qué es el tabaco y para qué se utiliza
El tabaco, en la forma que se presenta en este producto, es una mezcla de productos químicos que no se parece en nada a la hoja de tabaco original y cuya única finalidad comercial es aumentar el poder adictivo, enganchar al mayor número de personas y así aumentar los beneficios económicos de la industria del tabaco. Este producto se utiliza para “crear nuevos sujetos adictos a la nicotina” y para “satisfacer la necesidad de droga, una vez la persona ha caído en la adicción”.
2. Qué necesita saber antes de empezar a fumar tabaco
-
El tabaco no aporta placer ni puede gustar, tan solo elimina un malestar que se provoca una vez se instaura la adicción tras un consumo repetido.
-
Fumar no hace que te lo pases mejor.
-
El tabaco no te hace ser más moderno, interesante, atractivo o un sujeto con más personalidad, únicamente pone en evidencia tu capacidad para ser manipulado por tu entorno.
-
Empezarás no como un acto de libertad, sino todo lo contrario, por influencia social. Tú no eliges libremente ser fumador.
-
Terminarás enganchándote, es decir, sufriendo un trastorno mental que hará que dependas de la nicotina, obligándote a consumirla cada determinados minutos.
-
Tú salud se verá afectada con un 100% de probabilidades.
-
Tendrás un 50% de probabilidad de morir por causa de fumar.
-
El coste medio de tu consumo, en caso de que no mueras prematuramente, será de unos 80.000 euros (sin considerar las futuras subidas del precio del tabaco).
-
Cerca del 80% de precio que pagarás por este producto irá destinado a Hacienda, que lo usará para otros fines como: el salario de los políticos, el alquitranado de las carreteras, etc. De ningún modo esta recaudación sostendrá el sistema público de salud.
Advertencias y precauciones: Consulte a su médico o farmacéutico antes de empezar a fumar tabaco si usted se encuentra en algunos de estos casos:
* Es una persona que no desea acabar absurdamente con su vida
* No desea generarse a sí mismo un trastorno mental
Consumo de tabaco con otros medicamentos: Si usted toma otros medicamentos para mejor su salud, lo más sensato es dejar de fumar.
Consumo de tabaco con alimentos, bebidas y alcohol: Consumir tabaco junto a alimentos, bebidas y alcohol hará que se produzca una fuerte asociación entre ellos, de modo que a partir de ahora no disfrutará de la misma forma de las comidas y bebidas si no es con un cigarrillo en la mano.
Embarazo, lactancia y fertilidad: Fumar reduce las posibilidades de quedarse embarazada. Si fuma durante la gestación, aumentará las probabilidades de que su hijo sufra enfermedades o de padecer una muerte súbita. De la misma forma, aumentará las probabilidades de que no se produzca leche o que sea durante menor tiempo. Si fuma durante la lactancia, parte de los productos químicos del tabaco pasará a la sangre de su hijo. Falta investigación sobre otros efectos.
Conducción y uso de máquinas: Fumar mientras conduce aumenta las probabilidades de sufrir un accidente.
3. Cómo fumar tabaco
Coja un cigarrillo, enciéndalo con un mechero o cerilla, póngaselo entre los labios, succione y respire su humo.
Uso del tabaco en niños y adolescentes: Aunque la edad de inicio del consumo del tabaco es a los 13 años y la edad media los 16, las autoridades sanitarias prohíben la venta y consumo a menores de 18 años. No obstante, se ha demostrado la administración de esta droga a edades aún más tempranas: según un estudio, los menores de 18 meses que habitan con fumadores, inhalan al año una cantidad de humo de tabaco equivalente a unas 6 cajetillas de 20 cigarrillos.
Uso en pacientes de edad avanzada: Las personas de edad avanzada sentirán “erróneamente” que ya es demasiado tarde para dejar de fumar, pues creerán que el mal ya está hecho después de tantas décadas inhalando humo.
Si fuma más tabaco del que debe: Si fuma en exceso en alguna fiesta o acto social, no se preocupe, se levantará con sensación de no querer fumarse si un cigarrillo más en su vida. No importa, en pocas horas, cuando el nivel de nicotina disminuya en su organismo, su cerebro adicto le pedirá una nueva dosis y usted se la tendré que dar experimentando la sensación de que “ya vuelve apetecerle y agradarle”.
Si olvidó fumar su dosis habitual: Si se olvidó o no pudo administrarse su dosis de nicotina, no se preocupe. En cualquier momento puede fumarse los cigarrillos seguidos que hagan falta hasta alcanzar de nuevo el nivel de nicotina que su cerebro adicto necesite.
4. Posibles efectos adversos
Los componentes del tabaco se reparten por todos los tejidos del organismo, sería imposible describir todos los efectos adversos que produce fumar. Quédese con que la mitad de los fumadores morirá como consecuencia única y directa del consumo de tabaco, la salud de la otra mitad quedará seriamente afecta (enfermedades pulmonares, cardiovasculares, digestivas, urológicas, cáncer, etc.). Los efectos adversos que produce fumar no se pueden contrarrestar haciendo deporte o siguiendo una alimentación saludable.
Es importante que usted sepa que estos efectos para la salud solo son las consecuencias últimas del consumo prolongado de tabaco. El gran efecto adverso que produce el tabaco se sitúa en su mente, y se produce desde el principio y en el 100% de fumadores. Por eso es considerado como un trastorno mental. Este devastador efecto hace que la persona pierda la libertad de llevar una vida normal sin consumir repetidamente la droga, sumergiéndolo en un engaño mental de tal calado que impide al sujeto hacerse consciente de todo ello. Para consumar esta burla mental, la droga convertirá al cerebro sano en un cerebro adicto que pedirá imperiosamente una nueva dosis de droga cada cierto tiempo. Para convencer al fumador, el cerebro adicto construirá dos engaños principales que hará que existan dos tipos de fumadores:
-
El fumador que no quiere dejar de fumar. Este es el efecto más grave, pues la persona queda completamente sometida a la droga. Este engaño se sostiene con una serie de creencias erróneas que genera el cerebro adicto del tipo: “yo fumo porque soy libre para hacerlo”, “de algo hay que morir”, “fumar es un placer y no pienso renunciar a él”, etc.
-
El fumador que quiere dejar de fumar, pero no lo consigue porque tiene miedo y/o porque se siente incapaz. Este miedo y esta incapacidad se sostendrá en base a una serie de creencias erróneas que construirá el cerebro adicto del tipo: “yo no tengo fuerza de voluntad”, “siempre echaré de menos fumar”, etc.
Comunicación de efectos adversos: No es necesario que comunique a nadie si sufre algunas de las consecuencias negativas de ser fumador. El resto de fumadores seguirán fumando a pesar de comprobar lo nocivo que es para la salud. No importa que algún familiar o amigo muera por el tabaco, ellos seguirán administrando una nueva dosis a su cerebro adicto.
5. Conservación del tabaco
No se preocupe por conservar el tabaco en unas condiciones determinadas, se lo fumará antes de que pueda estropeársele. No obstante, si se olvida alguna cajetilla en algún bolso o bolsillo de una chaqueta, podrá encontrarlo en aquellas ocasiones en que se quede sin tabaco y los comercios estén cerrados. En esos casos de desesperación, se los fumará aunque se haya deteriorado el producto, usted solo se centrará en administrarle a su cerebro adicto su dosis de droga independientemente del sabor o picor en la lengua que pueda experimentar.
6. Contenido del envase e información adicional
Además de los productos químicos mencionados al principio de este prospecto, la combustión del tabaco hace que aparezcan más sustancias. Se estiman que usted se expondrá a más de 7.000 sustancias químicas.
Una de las letras que más me ha llegado…buenísimo de enhorabuena…
Muy buen artículo. Gracias Pablo.
No se puede describir mejor Pablo….gracias
Impresionante. Muy bueno.