Cualquiera que haya sido fumador durante alguna época de su vida, sabe perfectamente CUÁNDO NO es buen momento para dejar de fumar: siempre. Ahora bien, definir el momento CUÁNDO SÍ debemos intentarlo, parece una elección difícil de llevar a cabo para la gran mayoría. Siempre parece haber un motivo que nos hace retrasarlo (las fiestas de nuestra ciudad, una boda, un viaje, las vacaciones, etc.)
La mayoría de los fumadores aprovechan ciertas fechas simbólicas para fijar el momento, como son: la entrada del nuevo año, el fin de las vacaciones, el día del cumpleaños, el nacimiento de un hijo, etc. A lo largo de los años vamos “tirando el dado” para saber cuál es el día más apropiado. A medida que la fecha se aproxima, nuestra motivación disminuye y nuestros miedos a una vida sin tabaco aumentan.
Nuestra mente, ante la proximidad del día elegido, comienza a elaborar razones por las que retrasar nuevamente la fecha a un “supuesto momento mejor”, empujándonos a lanzar nuevamente el dado. Así, año tras año, y década tras década, vamos saltando de oca a oca, fumando porque nos toca, anhelando llegar a un día en que apagar el cigarrillo se convierta en un acto sencillo y agradable. Desgraciadamente esto no va a suceder. Tarde o temprano toca enfrentarse a los miedos, enseñarles los colmillos y demostrarnos de una vez por todas que nuestra vida es perfectamente compatible con la ausencia de tabaco.
Llega un día en que debes darle una patada al tablero y romper la partida. El tabaco no es un juego donde te puedan salir buenas cartas, o donde puedas engañar a tu contrincante. La adicción es un juego amañado donde nunca se gana. Por ello, lo mejor que puedes hacer es levantarte de la mesa y no seguir nunca más sus reglas. Reducir el número de cigarros, fumar mentolado, tabaco de liar o electrónico, compensar el tabaco con la práctica de deporte, mascar nicotina… todas son estrategias con la que queremos ganar una partida que desde el principio tenemos perdida. ¡No malgastes más tu tiempo!
La adicción al tabaco es un juego basado en reglas tramposas
No hay forma lógica de vencer
P.M.Alles – Psicólogo y escritor del manual para dejar de fumar: Fumabook
Excelente! No rendirnos, ni intentar vencerlo, patear el tablero y alejarnos. No pwrmitir que el carcelero haga su juego. En realidad creo q en este grupo y proceso dinamico de fumabook me rendi y acepte que soy una adicta.
Gracias!