Podríamos decir que ser adictos es como encontrarse en una isla desierta de la que queremos salir pero que, para ello, debemos superar una serie de obstáculos: construir un bote, llevar comida y agua, superar las adversidades climatológicas, etc.
Éste es el mismo problema al que se enfrentó Tom Hanks en la película Náufrago (Cast Away). Él llevo a cabo dos intentos importantes para salir de la isla. En el primero usó un pequeño bote hinchable. Tristemente, al cruzar la primera gran ola volcó, quedando el protagonista herido y obligado a regresar a la isla.
En un segundo intento, trenzó cuerda fuerte y resistente, unió sólidos troncos, colocó una vela y esperó a tener el viento favorable para que, al desplegarla, le ayudara a superar la gran ola.
Muchos de vosotros podréis pensar que también podría haber salido de la isla en el primer intento si hubiera tenido un poco más de suerte. Es cierto, pero también lo es que con esa frágil embarcación no hubiera sobrevivido mucho tiempo en el duro y vasto océano.
Con el tabaco pasa exactamente lo mismo. Es necesaria una correcta preparación para adquirir las herramientas necesarias para salir de la isla de la adicción. Son muchos los que creen que pueden vencer al tabaco sin una planificación previa, pero son también muchos los que no superan la primera gran ola de la abstinencia o los que, a los meses o años, comprueban que su bote no estaba bien diseñado para soportar el largo viaje de vivir sin nicotina. En lo que se refiere a la adicción al tabaco, nunca podemos cantar victoria antes de que avistemos Tierra (la Libertad definitiva), ya que en cualquier momento puede presentarse la inesperada tormenta que destroce nuestro pequeño bote hinchable de plástico.
Por todo ello es muy importante llevar a cabo una correcta preparación que nos asegure soportar las primeras grandes olas y las futuras tempestades que puedan surgir en medio de la calma.
No deposites tus esperanzas en un pequeño bote hinchable que no te exija esfuerzo en su construcción (parches de nicotina, cigarro electrónico, etc.). Tú debes ser el verdadero artífice del éxito.
También quiero mencionar cuando Tom Hanks logra rebasar la gran ola y observa con cierta añoranza aquella isla donde había estado atrapado aquellos tristes años. Eso nos recuerda a esa pena o nostalgia que nos produce imaginar nuestra vida sin tabaco.
Si no has visto esta película, te la recomiendo.
Siendo que empecé el libro cuando ya había dejado de fumar (un día antes), no sería contraproducente volver para leer el libro?
Continúa sin fumar por supuesto.