¿Un cigarro de despedida?

hand-997395_960_720

Es muy habitual encontrar personas que al dejar de fumar necesitan, casi a modo de ritual, consumir un último cigarrillo a modo de despedida.

La gente se despide de las cosas buenas. Cuando te vas a vivir a otra ciudad, te despides de tu familia y de tus amigos, no de la gente que te llevas mal.

Despedirse del tabaco, fumando un cigarrillo, prestándole atención y asignándole un valor símbolico, es una mala señal de que partimos el viaje arrastrando algunas creencias nada aconsejables (que se le va a echar de menos toda la vida, que gusta, que aporta placer…).

Cuando uno deja de fumar, tiene que deshacerse del tabaco e interrumpir su consumo como cuando se ve marchar a alguien molesto (un vecino que ha sido muy pesado, un mal jefe que se va a otra empresa), aplaudiendo y no deseando verle nunca más. A esta gente nunca le harías una buena despedida.

Cuando uno deja de fumar, tira los mecheros, los ceniceros y todo el tabaco a la basura con decisión y con coraje. NO SE LE HACE UNA FIESTA DE DESPEDIDA.

http://www.fumabook.com

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s