¿Qué hacer cuando te has fumado un cigarrillo?

dejar de fumar caer

Es muy frecuente que, durante el proceso de dejar de fumar, haya un día en que las fuerzas aflojen y sucumbas a la tentación de fumarte un cigarrillo. Este hecho puede tener dos finales:

1. El más común, desgraciadamente, es que te sientas derrotad@ y sigas fumando con normalidad, dejándolo para otro momento «supuestamente mejor».

2. Asumir el tropiezo como un resbalón normal, aceptable y asumible como parte normal del aprendizaje que supone adaptarte a una nueva vida sin tabaco y seguir sin fumar.

Es cierto que hay personas que precipitan voluntariamente ese cigarrillo como un acto de rendición para volver a fumar, ahí hay poco que decir (deberás realizar una profunda reflexión). Ahora bien, cuando es el resultado imprevisto de un momento de debilidad, de una situación en la que nos hemos visto desbordados, la cosa es bien distinta.

Cuando nos ocurre eso, justo después de apagar el cigarrillo, nos suele entrar una gran Culpa y la duda de saber si eso ha significado que hemos sido definitivamente derrotados. Aquí, lo más importante, desde un primer momento, es mantener la calma. A veces, cuando dejamos de fumar, necesitamos medirnos, probarnos, ponernos al límite… es parte del Aprendizaje. Esto nunca debe buscarse conscientemente, lo mejor es que no ocurra, pues lo más probable es que te haga volver a fumar de una forma definitiva. Pero si te ocurre sin preveerlo y «sin poder haberlo evitado», lo más importante es que intentes no meter el humo en los pulmones y, sobre todo, apagarlo lo antes posible una vez te des cuenta del gran error que estás cometiendo.

Ya, una vez apagado, no le des importancia y no te sientas culpable, en absoluto. La Culpa es la que te hará volver a fumar. No hace falta que te lamentes ni que lo chilles al mundo entero (te arriesgas a que alguien te diga aquello que tanto puede doler de: «te lo dije, yo ya sabía que tú no ibas a poder» y te dinamite tu autoestima y motivación). ¡Sacúdete y levántate como si nada hubiera ocurrido!… y continua sin fumar.

Recuerda que un cigarrillo suelto es un verdadero peligro cuando has dejado de fumar. Ni una boda, ni un mal día en el trabajo, ni la enfermedad de un familiar, ni una discusión con tu pareja ha de ser motivos que justifiquen encenderte un cigarro, en nada te ayudará.

Tienes que ser muy amable contigo. No tienes que demostrarle nada a nadie, ni te tienes que exigir la perfección absoluta. Es importante que seas sincero contigo mismo y no te engañes.

Recuerda que este tipo de sucesos puede ocurrirte de forma muy puntual. Si te ocurre más veces es que algo se está haciendo mal y no se está produciendo un correcto Aprendizaje.

P.M. Alles – Psicólogo y escritor del manual para dejar de fumar: Fumabook

http://www.fumabook.com

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s