Capítulo 8

Cuando hayas conseguido salir de ese túnel imaginario, y contemplar y disfrutar de la Libertad, comprenderás de inmediato que todos aquellos pensamientos que te habían impedido dejar de fumar durante tantos años eran completamente falsos. El Carcelero ya no estará a tu lado, sino arrastrándose por el suelo como un pobre diablo. Te girarás y podrás comprobar que aquel túnel oscuro realmente no existía, era solo una falsa construcción más de aquel inmenso engaño que había supuesto durante tanto tiempo estar enganchado a la droga más extendida por este mundo. Te sentirás bien, te sentirás FELIZ, y comprobarás que tu autoestima queda fuertemente reforzada. ¡El Capitán habrá regresado y la luz del sol ya no cegará tus ojos!